martes, 5 de noviembre de 2013

CRÓNICA. El CÁNCER SE LLEVÓ A MI ABUELA

Su rostro ya reflejaba el pasar de los años, el cansancio y la ardua lucha de haber criado sola a seis hijos, y a pesar de eso cuidar a 12 nietos como si ella los hubiera “parido”, era lo que siempre decía. Recuerdo mucho lo cariñosa que era conmigo, todos los días se levantaba muy temprano a bañarme y cambiarme para ir al jardín, ya que mi mamá trabajaba de lunes a sábado y regresaba por la noche.
Me trataba como una hija más, me daba de comer en la boca, jugaba conmigo, y al peinarme el cabello, siempre me cantaba “chiquitita dime porque las estrellan brillan y desaparecen Déjame compartir tu alegría chiquitita”.

Al pasar los años a pesar que ya estaba dejando de ser una niña, ella igual me consentía, y me seguía tratando como una niña pequeña a pesar de que ya tenía 10 años y ya no me gustaba jugar con muñecas, ni ponerme vestidos.

Fue exactamente un 15 de febrero, cuando yo tenía 11 años, y le detectaron cáncer, fue un golpe muy duro para la familia, y aún más para mí, porque siempre creí que ella seria eterna, y que nunca me faltaría.
Era admirable verla todos los días, levantarse muy temprano a preparar el desayuno para todos, y querer hacer todo en la casa a pesar de su enfermedad. Pero el cáncer se la llevo muy rápido. Dios solo me permitió disfrutar de ella, 5 meses más.

Fue exactamente un 26 de julio 2004, mientras dormía, ella se apareció en mis sueños, una luz resplandeciente la rodeaba, como si fuera un santo, estaba parada frente a mi acariciando mi cabeza. Desperté al sentir sus caricias, y me sorprendí al verla levantada, ya que el cáncer la había deteriorado rápidamente. Al verla empezó hablarme “tengo que irme, porque siento que ya cumplí aquí con todos ustedes, no llores por que ya no me veras físicamente, porque siempre estaré a tu lado cuidándote te amo” esa fue la última vez que escuche un te amo de su boca. Al despertar ella agonizaba lentamente
 Son muchos los recuerdos que tengo de mi abuela, es muy grande la admiración y respeto que siento por ella, a pesar de que hace  8 años ya no esté a mi lado. Pero siempre hablo con ella y sé que me escucha.

Ella para mi es y siempre será el mejor ejemplo de mujer y de madre, que pueda tener, al igual que mi madre. 

Por Alejandra Idañez

4 comentarios:

  1. oww es realmente una crónica muy conmovedora , realmente muy buena , ya que das a conocer lo mucho que amaste y sigues amando a tu abuela . Muchas personas se deben de sentir identificadas con esta enfermedad ya que en la actualidad muchos sufren de ella.

    ResponderEliminar
  2. Me encanto tu cronica, me ha transmitido muchos sentimientos y me he sentido muy identificada, no tanto por lo de la enfermedad si no por el amor que sientes por ella. Sigue asi Alejandra muchos exitos :)

    ResponderEliminar
  3. me parecio una cronica muy emotiva , ya que refleja el grana amor que se siente por un ser querido, en este caso tu abuela felicidades
    Liliana Robles

    ResponderEliminar
  4. Definitivamente una muy linda cronica muy conmovedora! Perder a un ser querido es lo mas dificil que uno puede pasar! Una abuelita es siempre un angel que nos cuida y nos va a cuidar! Linda interpretacion descripcion muy buena! Felicidades!

    ResponderEliminar

Buscar este blog